¿ Por qué venir a Madrid en Navidad?
¿ Por qué venir a Madrid en Navidad?
Madrid es una ciudad excitante, con mucho movimiento y acción, con una oferta más que amplia en todos los aspectos, el gastronómico, el de ocio y cultural, el artístico, el deportivo, pero además, Madrid en Navidades, aunque parezca imposible, está más animada que nunca y a pesar del invierno, se llena de luz y de calor.
La ciudad rebosa de alegría y se respira un ambiente de fiesta mágico. La gente se echa a las calles a pasear, a admirar la preciosa decoración navideña con millones de bombillas de colores en edificios y avenida, los arboles de diseño, o los preciosos, y algunos gigantes, Belenes.
Los comercios hacen promociones fabulosas y tanto madrileños como visitantes, salimos a comprar en los múltiples mercados navideños como en el tradicional de la Plaza Mayor, que siguen año tras año con las ventas de arboles, figuritas para el Belén, artículos de decoración navideña o de cotillón para la fiesta de fin de año.
En estas fechas salimos de tapas cantando villancicos y la zambomba, sobre todo los días 24 y 31 de diciembre antes de la celebración en casa con familiares. Cuando entras en un bar, todos somos amigos, cantamos, algunos bailamos y hacemos brindis por un año nuevo mejor para todos. Todo es buen rollo y grandes deseos.
Es típico ir a tomar una taza calentita de chocolate con nuestros famosos churros y porras que son deliciosos, o el rico roscón de Reyes con la ilusión de que te toque el regalito y no el haba, porque entonces te toca pagar a ti el roscón¡
En estas fechas Madrid te ofrece una gran y variada oferta de musicales, obras de teatro, conciertos, exposiciones en Museos, actividades para niños y los restaurantes preparan menús navideños muy apetecibles con platos típicos de esta época.
Si prefieres salir de la ciudad, Madrid tiene dos estaciones de esquí a tan solo 40 minutos, donde la nieve espera a los amantes de este deporte, y si no lo practicas, para disfrutar de los trineos, las raquetas de nieve, o un simple paseo para admirar la maravillosa sierra de Guadarrama, hacer un muñeco de nieve y tomarte un caldo calentito.
Hay una tradición en España en la noche de Fin de año, que es muy peculiar y divertida. Todos lo españoles preparamos una bolsita con 12 uvas cada una, y a tan solo unos minutos para que acabe el año, nos sentamos frente al televisor, donde transmiten las campanadas desde la puerta de Sol en Madrid, donde hay un reloj colocado en un templete sobre la Casa de Correos. Fue inaugurado en el año 1866 por la reina Isabel II con motivo de su cumpleaños y tras haber pasado ya un siglo y medio sigue funcionando en perfecto estado.
Este ritual es para despedir el año. Consiste en pedir un deseo y se cumplirá si eres capaz de comerte las 12 uvas al ritmo de las 12 campanadas durante los últimos segundos del año. Una hazaña, ya que van rápido y a más de uno les ha pasado una mala jugada .Tras la última campanada todos nos abrazamos y deseamos de corazón, que el año nuevo sea mejor y que se cumpla alguno de nuestros deseos.
El día 5 de enero, la noche de Reyes, la más mágica del año sobre todo para los más peques, tiene lugar la gran cabalgata, un despliegue de carrozas, malabaristas, músicos, bailarines, personajes disfrazados, globos, música, y mucho color, que transcurren por las principales calles de Madrid para que los niños puedan ver a sus adorados 3 reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, que vienen de oriente siguiendo a la estrella que les guía hacia el recién nacido Mesías. En su camino les van a dejar, durante sus dulces sueños, algunos de los regalos que les han pedido en sus cartas, miles de caramelos vuelan por los aires y todos estamos felices por ver tantas sonrisas y ojos iluminados por la emoción y la ilusión.
Así son las Navidades en Madrid, en España, no te apetece acompañarnos?
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