Tarta de cumpleaños de chocolate y nata

¡Mi hija cumplió 10 añazos ya¡ Y me pidió una tarta de cumpleaños de chocolate y nata de esas con muchos pisos y decoración.

Este fue el resultado, una tarta que no es nada complicada de hacer, aunque lo parezca y fresquita, ya que, al llevar mucha nata y chocolate, has de conservarla en la nevera.

¿Nos ponemos manos a la obra?

INGREDIENTES:

Para el bizcocho:

450 gr de harina bizcochona ( ya preparada con levadura). Si no harina de trigo normal + dos sobres de levadura química)
350 gr de azúcar
2 yogures naturales
6 huevos
150 ml de aceite de girasol

Para la crema de relleno:

400 gr de queso mascarpone
400 gr de nata para montar 35%MG
100 gr de azúcar
30 gr de cacao puro en polvo

Crema de cobertura:

100 gr de mantequilla pomada
250 gr de queso crema
50 gr de azúcar glas
200 gr de nata para montar
6 cucharadas de cacao puro en polvo

Baño de chocolate:

75 gr de chocolate fondant mínimo 50% de cacao
3 hojas de gelatina aprox.6 gr.)
60 gr de agua
110 gr de azúcar
15 gr de cacao puro en polvo
30 gr de nata para montar 35% MG

Decoración:

Palitos de chocolate
Estrellitas doradas
Bolas de chocolate blanco y con leche de diferentes tamaños
Bombones Ferrero Rocher
Globo con confeti y lazo o cualquier otro a tu gusto

RECETA PASO A PASO:

Lo primero que vamos a hacer para hacer esta tarta de cumpleaños de chocolate y nata es poner en un robot de cocina, o en un bol ( y usaremos unas varillas), los huevos y el azúcar y batiremos hasta que quede blanquecina y espumosa la mezcla.
Añadimos el aceite y volvemos a batir hasta que esté integrado todo y a continuación los yogures y repetimos la operación.
Vamos precalentando el horno a 170ºc y preparamos dos moldes redondos desmontables. Los embadurnamos bien de aceite o mantequilla y espolvoreamos un poco de harina para que luego no se peguen.
Añadimos la harina y removemos hasta obtener una mezcla sin grumos. Vertemos la mitad en un molde y la otra en el otro y metemos al horno unos 40/45 min. Nunca abras el horno antes de los 20 min. o se te bajará el bizcocho al bajar la temperatura. Mejor comprueba si están hechos a los 40 min con la punta de un cuchillo. Si al pinchar en bizcocho hasta la mitad, sale limpio, estás listo si no, déjalo otros 5 min.
Mientras tanto vamos a hacer la crema de relleno. Es muy sencillo. Pon todos los ingredientes menos el cacao en un bol grande. Si está frío te montará mejor la nata. Es importante también que tanto la nata como el mascarpone estén fríos. Empieza a montar con dobles varillas o con robot de cocina a velocidad alta. Cuando veas que está espeso y que ha adquirido consistencia es que ya se han montado. Agrega el cacao en polvo y remueve un poco a velocidad baja. Reserva en la nevera.
Para la crema de cobertura, con la que vamos a recubrir la tarta, hacemos con lo mismo que en el paso anterior pero sin utilizar el cacao en polvo. En este caso la mantequilla no tiene que estar fría, por que si no, quedaran grumos y no se mezclará bien con el resto de ingredientes. Cuando hayas mezclado todo, guarda una tercera parte en la nevera. El resto lo divides en dos, una parte la mezclas con 2 cucharadas de cacao, y la otra con 4, de tal manera que al final tienes 3 cremas de cobertura de tonalidades diferentes, blanca, tostada y morena. Guarda en la nevera.
Y como tercera crema, nos queda el baño de chocolate. Primero dejamos las 3 hojas de hojas de gelatina en un plato hondo en remojo con agua fría. En un cazo ponemos el agua y el azúcar hasta que hierva, bajamos a fuego medio-bajo y dejamos 5 minutos para que espese un poquito. Echamos el chocolate fondant en trozos y removemos hasta que se deshaga y a continuación el cacao en polvo. Añadimos la nata y removemos todo hasta tener una textura lisa y sin grumos. Escurrimos bien la gelatina y la incorporamos a la mezcla y removemos hasta que se deshaga la gelatina. Apagamos el fuego y retiramos el cazo. Lo ponemos en un recipiente tipo para servir café o té que tenga boquilla para luego cubrir la tarta de este chocolate, pero necesitamos que caiga en hilo más o menos fino. ES MUY IMPORTANTE, que esta mezcla la vayamos removiendo con una cuchara cada 5 minutos, para que no se quede costra ni grumos y se vaya enfriando y cogiendo consistencia. Tiene que quedar como una bechamel espesita pero no mazacote ni con grumos.
Saca del horno la tarta y deja enfriar hasta que no te queme. Desmonta el molde y termina de enfriar sobre una rejilla.
Con la ayuda de un corta tartas, o yo lo he hecho con un cuchillo grande, retira las partes de sombrero o abultadas del bizcocho, si es el caso, y las guardas para desayunar, por ejemplo. El resto de cada bizcocho los partes en dos de forma horizontal , quedándote dos capas por bizcocho, o sea, en total 4 capas.
Coloca una base sobre el plato o bandeja donde quieras presentar la tarta. Saca la crema de relleno de la nevera y ponla en una manga pastelera. Yo no utilicé boquilla, simplemente le hice un corte de un cm aproximadamente en la punta. Ahora tienes que ir rellenando cada capa con esta crema. Yo hice una forma de espiral , desde el centro hasta afuera. Si te parece complicado usar la manga, simplemente pon crema sobre cada capa con una espátula. Vamos a repetir esta operación hasta poner las 4 capas, pero no pongas crema en la última, o sea por encima de la tarta.
Ahora toca la crema de cobertura. Sácalas de la nevera y con la ayuda de una espátula empieza a repartir la cobertura blanca por toda la tarta o hasta que se te acabe. VE dando vueltas al plato mientras la extiendes, te ayudará a deslizar mejor la crema. Ahora haz lo mismo con la más clarita, y al final con la más oscura. De tal manera que se van a mezclar las tres tonalidades pero va a quedar un marmolado muy bonito.
Ya solo queda el baño de chocolate. Asegúrate que no está caliente pues si lo está, derritirá la crema de la tarta. Si aún está templado, guarda la tarta en la nevera y sigue removiendo este chocolate para que no se queden grumos. Cuando esté ya a temperatura ambiente, empieza a echarlo por los bordes de la tarta con cuidado para que te queden las lágrimas parecidas a la de las fotos, unas más largas, otras más cortas. Luego cubre el resto que queda por encima hasta cubrirla entera. Deja enfriar en nevera.
Y para finalizar esta tarta de cumpleaños de chocolate y nata
¡El último paso es decorarla! Como en la foto o como más te guste.

Espero que esta tarta de cumpleaños de chocolate y nata os haya servido de inspiración para poder hacer alguna tarta preciosa y rica para días especiales.

Os recuerdo que en mi instagram @cocinayviajes tenéis más recetas e ideas geniales, recomendaciones gastronómicas y sorteos suculentos¡

Con todo mi cariño,

Mireia Alum